Hace ya tres años que conocí a

Hace ya tres años que conocí a Mathieu o Mateo, para quien le sea más fácil, Colo tenía apenas dos meses, y necesitaba que me ayudasen a conocer a mi primera mascota, y el destino hizo que nuestros caminos se cruzasen.  A partir de ahí, mi relación con los amigos de cuatro patas, cambió radicalmente y entendí que a quien había que educar era a mí, si realmente quería disfrutar de quien hasta el momento ha sido quien me ha enseñado la palabra AMOR en otra dimensión.

Y así comenzó nuestra relación, hasta que decidimos que podíamos realizar un bonito proyecto en conjunto, y es el de poder dar a los amigos de los animales el mejor recuerdo, plasmar en imágenes momentos que se convertirán en inmortales.

Si habéis navegado por mi web, ya sabréis un poco de mí, ahora será Mateo, quien os cuente un poco sobre su pasión y os digo sin lugar a equivocarme ni a exagerar, que tiene un DON para con los animales.

 

 

Mi pasión por los perros empezó hace unos 7 años, me formé como educador/adiestrador canino con verdaderos profesionales que me enseñaron las maravillas del mundo canino.

Desde entonces, me he dedicado a ayudar a los dueños a entender a sus perros y a poder solucionar los problemas de conductas no deseadas o conflictivas. Durante todos estos años, los perros me enseñaron  muchísimo sobre ellos. Observándolos, aprendí a ¨ver¨ (lenguaje corporal) y entender la comunicación canina.

Para mí, ser un buen educador/adiestrador canino requiere la presencia de al menos, estas cualidades:

  • Respeto : siempre respetar la naturaleza, personalidad y carácter del perro.
  • Confianza : hacer todo lo posible para ganar la confianza del perro.
  • Calma : mantener la calma es muy importante para poder gestionar correctamente la situación.
  • Equilibrio : encontrar el punto de equilibrio del perro entre mente, emoción y cuerpo.
  • Comunicación : saber interpretar correctamente el lenguaje corporal del perro y también saber transmitir o comunicarse con el perro
  • Creatividad : Cada perro es único y requiere un trabajo muy personalizado y mucha observación. La creatividad es primordial para hacer un buen trabajo.
  • Empatía : importante para entender al perro y poder ayudarle de la mejor manera posible
  • Amor : Es lo que une todos los puntos anteriores. El amor es la energía y la motivación en querer y hacer todo lo posible para el bienestar del perro.

Tu guía canino representa todos estos valores, mi trabajo consiste principalmente en guiar  a nivel emocional a los perros y a enseñar a los dueños cómo convertirse en un líder de confianza, justo y respetuoso.

SI QUIERES TENER UN RECUERDO DE TU MASCOTA Y QUE ESTE PERDURE EN EL TIEMPO.

¡PONTE EN MANOS DE PROFESIONALES!